martes, noviembre 19, 2024
InicioPredicas¿QUE ES LA SANACIÓN INTERIOR?

¿QUE ES LA SANACIÓN INTERIOR?

La sanidad interior o sanidad del alma es el proceso mediante el cual el individuo es liberado de ataduras que le impiden gozar de su nueva vida en Cristo y tener una plena realización como cristiano bíblico y como individuo.

La obra redentora de Jesús ofrece mucho más que solamente el perdón; ofrece también la redención integral y total del individuo en su Espíritu, Alma y Cuerpo. Siendo el hombre un ser tripartido (tres partes) tiene necesidades en cada una de esas áreas, pero en Jesucristo hay provisión para cada una de ellas.

Isaías 53,4-6, 11.

“Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; mas Yahve cargó en él el pecado de todos nosotros.”. “11 Verá el fruto de la aflicción de su alma, y quedará satisfecho; por su conocimiento justificará mi siervo justo a muchos, y llevará las iniquidades de ellos”.

LA MENTE O EL ALMA

1) Nuestra mente o alma tiene 3 niveles, el conciente, el subconsciente y el inconciente.

A. El conciente es todo conocimiento o pensamiento, que sabemos con claridad. A este nivel opera el carácter social.
B. El subconsciente es el reino de oposición a la razón. Aquí opera sentimientos y deseos egoístas.
C. El inconciente es el reino de los pensamientos descontrolados.

2) Nada se olvida. Nuestra mente es como una grabadora.

3) Heridas que permanecen sin sanar, afectan nuestra conciencia, cambian, controlan nuestro carácter y permanecen hasta que tomamos acción para eliminarla.

EL ORDEN DE DIOS PARA EL HOMBRE.

El orden que Dios ha dado al hombre para que se gobierne a si mismo, es que su espíritu debe gobernar sobre su alma (emociones, mente y voluntad) y sobre su cuerpo. Sin embargo a causa de heridas sufridas en nuestro interior, este orden se pierde en varias formas:

Debido al pecado (heridas), el cuerpo gobierna al hombre, quedando sujetas el alma y el espíritu (Gálatas 5,16-17). Ver 2 Timoteo 1,7. “7 Porque no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio propio”.

CRISTO LO HIZO POSIBLE PORQUE:

Jesucristo es el mismo ayer, hoy y por los siglos (Hebreos 13,8); El puede ir al al pasado de una persona y sanarle hoy. El conoce nuestra vida y las experiencias de nuestro pasado. Solo El puede ir a los momentos dolorosos del pasado y poner su ungüento sanador (Isaías 53,4).

La sanidad interior es la presencia de Cristo sanando esas heridas internas que nos afectan.
La persona solamente tiene que apropiarse de las promesas de Dios para poder ser sanada (Jeremías 30,17; 33,6; Salmos 143,11-12).

¿EN QUE CONSISTE LA SANIDAD INTERIOR?

La sanidad interior está relacionada con el individuo y su pasado. En la vida emocional no hay espacio ni tiempo, lo que afecto al individuo en el pasado (niñez, adolescencia, adultez) tiene vigencia en el presente y futuro.

Ver Isaías 53:3-5
“3 Despreciado y desechado entre los hombres, varón de dolores, experimentado en quebranto; y como que escondimos de él el rostro, fue menospreciado, y no lo estimamos. 4 Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. 5 Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados”.

Efectos que tienen las experiencias dolorosas y traumáticas en nuestra vida.

Somos el producto de todas las experiencias de nuestra vida. Nuestras experiencias pasadas determinan nuestras relaciones a las situaciones presentes. Si hubo heridas en el pasado, estas distorsionan lo que percibimos en el presente. En la medida en que reaccionamos a un simple problema de manera muy violenta, depresiva, etc. Podemos sacar la conclusión de que no respondemos normalmente a las situaciones actuales porque hay ataduras en nuestra vida.

¿Cómo vienen y cuáles son las fuentes más comunes de heridas a nuestra vida?

Las necesidades emocionales básicas en el hombre se satisfacen por medio del amor y la comunicación. El rechazo provoca que el individuo no pueda recibir amor, seguridad, aceptación e identidad. El rechazo es una herida profunda que causa destrucción en el individuo. Las fuentes más comunes se dan a continuación:

A- Antes de nacer:
-Rechazo en el feto a causa de embarazo no deseado.
-Enfermedades físicas de la madre. (niño nace enfermo).

B- En la niñez:
-Falta de cuidado y atención en la infancia y en la niñez.
-Comparación entre hermanos, que produce rivalidad o discordia.
-Sarcasmo, frases groseras o hirientes.
C- En la adolescencia:
-Padres que establecen metas falsas o injustas.
-Relaciones paternas defectuosas.
-Malas relaciones familiares.
-Abuso

D- En el Matrimonio:
-Conflictos entre la pareja.
-Infidelidad de una o ambas partes.
-Menosprecio.
-Abuso físico, sexual o emocional.

E- En la sociedad en general.
-Falta de aceptación
-Grupos que lo excluyeron (en la escuela, el colegio, trabajo, iglesia)
-Malos tratos.
-Competencia cruel y desleal.
-Amistades destruidas.

Preparación para recibir sanidad interior.

En una ministración de sanidad interior es necesario identificar las áreas de necesidad que tiene la persona.
Entender su necesidad de sanidad interior y enfrentar sus heridas.

*En muchos casos encontramos que el individuo tiene un alto grado de engaño mental; el asume lo siguiente: “Estas experiencias me afectaron pero solo en el pasado; ya pasaron y yo ya perdone”. La persona debe reconocer que aun cuando es cierto que estas experiencias están en el pasado, en realidad siguen teniendo resultados dañinos sobre su vida en el presente.

*Aunque no sea fácil, el individuo debe enfrentarse con la verdad en la relación a las experiencias que han vivido y deberá reconocer su necesidad de ser sanado.

*Esto implica caminar por el sendero de su pasado y tomar conciencia de toda experiencia de rechazo, sufrimiento y pecado que le ha dejado emocionalmente fragmentado.

*Esto implica que el individuo debe: Reconocer lo que nunca ha reconocido; aceptar lo que nunca ha aceptado; confesar lo que nunca ha confesado.

A-Perdonar no es:
-Esforzarse por olvidar lo que paso
-Negar la ofensa recibida
-Dejar que el tiempo borre lo ocurrido
-Apartar al ofensor de su vida.
-Ignorar lo que paso o ser indiferente hacia ello.
-Simplemente disculpar a alguien.
-Decir te perdono, sin haber perdonado de corazón, sanar la herida.

B-Perdonar es algo más profundo. Mateo 18, 27-35. Es:
-Cancelar la deuda pendiente.
-Soltar a la persona por el daño que causo.
-Liberar o “dejar ir” a la persona ofensora.
-Tener compasión.
-Tomar la decisión de perdonarle como un acto de voluntad.
-Ser como Cristo.

Entender su necesidad de perdonar.

Muchos cristianos son atormentados por el enemigo, por las heridas del pasado y por su falta de perdón a quienes causaron estas heridas. La falta de perdón le da al enemigo una puerta abierta para que el se mueva oprimiendo y atormentando. Cuando un cristiano camina sin perdonar, Satanás no lo respeta y utiliza esto en contra de el. (1 Juan 1,7; 2,9-11).

Algunas personas creen que tienen derecho a guardar estas cosas porque les causaron daños, y en realidad el guardar esto lo que hace es que no se olvide la ofensa, que no perdone y que este preparándose para tomar venganza, y eso espiritualmente nos drena, ya que estamos tomando el lugar de Dios para hacer juicio. Dios ha dicho que el es el juez que juzga con juicio justo, desde su Trono que esta cimentado en justicia y juicio.

“El temor de Yahve es limpio, que permanece para siempre; Los juicios de Yahve son verdad, todos justos” Salmos 19,9
Tu trono, OH Dios, es eterno y para siempre; Cetro de justicia es el cetro de tu reino”

Salmos 45,6
“Justicia y juicio son el cimiento de tu trono; Misericordia y verdad van delante de tu rostro”. Salmo 89,14.
“Mas Dios es el Juez; A éste humilla, y a aquél enaltece”. Salmo 75,7

 

Artículo anterior
Artículo siguiente
RELATED ARTICLES

1110 COMENTARIOS

- Advertisment -

Recientes